“La educación prohibida” es una película-documental que
cuestiona la situación del sistema
educativo actual. Un grupo de
estudiantes adolescentes hacen una redacción criticando todos los aspectos
negativos que encuentran en su propio centro y que consideran que tienen que
llegar a su fin cuanto antes.
Para conseguir
salir de este bache, la educación tiene que avanzar, tiene que crecer, tiene
que CAMBIAR. Y para ello es
necesario el trabajo en equipo, en comunidad, es totalmente necesario el
mantenimiento de una relación constante entre educandos, educadores y familias.
Podemos
entender la labor actual de los maestros como un mecanismo de control y
manipulación, lo cual es una muy mala costumbre que supone que el docente sea
el que dirige todo el proceso. Ante esto llegamos a la idea de que un maestro
no tiene que imponer normas u obligaciones, sino que tiene que proponer ideas para llevar a cabo.
Ante esto,
podemos concretar que la mejor forma de educar
es desde el amor. Si queremos
obtener una sociedad diferente, lo único que tenemos que hacer, realmente, es
amar a los niños y que ellos aprendan a amar a los demás. Sin embargo puede
resultar difícil para los maestros enseñar
las emociones puesto que a ellos no se les ha enseñado a gestionar estas
emociones. Difícil sí, pero nunca imposible.
Por último
quiero añadir a este breve comentario una cita textual que aparece en la
película que me ha llamado la atención: “Estudiar
no es un acto de consumir ideas, sino de crearlas y recrearlas”, Paulo
Freire.
Además,
os aconsejo que saquéis un poco de tiempo para ver la película, es muy
recomendable. Cada minuto de ella te hará reflexionar y darte cuenta de cuál es
la situación de la enseñanza en la
actualidad, al mismo tiempo que descubrir muchas soluciones para mejorarla
teniendo en cuenta que esto no es “un camino de rosas”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario